Corpus Christi Toledo: día grande en la Ciudad Imperial

Ayer, 26 de Mayo, se celebró en Toledo el gran día del Corpus Christi. Todas las calles del casco histórico de la Ciudad Imperial se visten de largo para mostrar su mejor cara y sorprender a visitantes y turistas.
Como toledana, no podía dejar escapar esta ocasión para mostrarte lo preciosa que luce estos días la ciudad.

La festividad del Corpus Christi es una tradición celebrada en Toledo desde hace siglos, y las primeras referencias que se encuentran al respecto es del año 1418, cuando aún la catedral no estaba ni terminada.

En el Corpus de Toledo, la Custodia de la Catedral Primada recorre las principales calles del casco histórico de Toledo.

Preparación de las calles de Toledo para el Corpus Christi

Desde un mes antes que se celebre el día del corpus, las calles de Toledo ya empiezan a ser adornadas para este día tan especial. Comenzarán con los toldos que se colocan por las calles por donde va a pasar el Corpus. Estos toldos sirven para proteger el principal elemento del Corpus: La Custidia de la Catedral Primada.

Además, también sirven para proteger a toledanos y miles de turistas del calor que suele hacer en estas fechas.

Posteriormente se comenzarán a colocar en las calles los adornos florales y también todos los detalles de banderas, faroles, etc.

La Custodia de Arfe

Según la web toledo-turismo, aquí nos dan información interesante sobre la Custodia: “El objeto más importante que se guarda en la capilla del Tesoro es la gran custodia de Enrique de Arfe (encargo del cardenal Cisneros) que elaboró entre 1517 y 1524. Es de traza gótica arcaizante y de una gran belleza arquitectónica. En un principio se labró en plata pero a finales del siglo XVI el arzobispo Quiroga mandó que se dorase, para hacer juego con la custodia del altar mayor, que es de madera dorada.

El Cardenal Cisneros deseaba una custodia de mayor presencia e importancia que la de Isabel la Católica para que luciera en la procesión del Corpus Christi de Toledo, la más importante que se celebraba en Castilla. La custodia tardó siete años en elaborarse y su coste superó los quince millones de maravedíes, de los que Arfe recibió, además de los 2.700 reales estipulados, un aguinaldo de 2.500 maravedíes que el cabildo catedralicio le entregó en la Navidad de 1523 impresionado por su trabajo.

Tiene planta hexagonal. Se va elevando en columnillas que están primorosamente ejecutadas, con adornos en pedrería y variadas figuritas de ángeles, santos, florones, campanitas y espigas. El conjunto se cierra en el último cuerpo donde está colocada una cruz del siglo XVI. La peana sobre la que se sustenta es barroca del siglo XVIII.

En Toledo se tiene por costumbre desde el año 1595 sacar esta custodia en la procesión del Corpus Christi, sobre una carroza fabricada para este fin con una nivelación muy ajustada que se acciona mecánicamente. En la procesión van por delante de la custodia las autoridades políticas y eclesiásticas y detrás los cadetes de la Academia de Infantería.”

El día grande: Corpus Christi de Toledo

El día del Corpus, desde primera hora de la mañana, ya se empiezan a ver los turistas paseando por las calles, y si hay algo que caracteriza este día, además de la decoración de las calles, es el olor a tomillo/romero.

La ciudad ya está de celebración y eso se nota. La banda recorre las calles del casco tocando canciones populares, hay desfile de gigantes y cabezudos y ya se comienzan a ver las sillas reservando los mejores huecos para disfrutar del Corpus.

La plaza de Zocodover en el Día del Corpus

La plaza principal del casco histórico también es lugar de paso del Corpus Christi de Toledo como no podía ser de otra forma. Aquí dejo algunas fotillos de esta plaza.

La Catedral de Toledo adornada para el Corpus

Pues esto es todo. Espero que si aún no has visitado Toledo en este día, te animes para el año que viene.  Eso sí, se recomienda acudir a primera hora de la mañana para poder disfrutarlo. En mi caso, para poder hacer este artículo sobre el Corpus, fui al centro de Toledo a las 8 de la mañana, y aún así a estas horas ya había gente por las calles.

También, es muy recomendable visitar el Corpus de Toledo la noche antes, pues ya las calles están en todo su esplendor y con el encanto de la ciudad de noche merece la pena.